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domingo, 23 de marzo de 2014

Carrera de montaña Alto Sil 2014

Si me pongo a hablar de una carrera de montaña que sale de un genuino pueblo  minero del Bierzo, que tras ascender 3 cumbres y un cortafuegos bestial conocido como "el muro", pasar por una preciosa aldea semi abandonada, y correr por el lateral del cauce de un río con el agua por encima de los tobillos durante unos cuantos kilómetros,  vuelve al punto de partida para degustar una fantástica paella, a mucha gente no le dirá nada, pero para  mi es la carrera más importante del año.

Dicen los corredores punteros del trail  que esta prueba no tienen nada que envidiar a las carreras de la copa del mundo en las que han competido con  anterioridad. Para mi que soy un corredor más básico que el arado de vertedera y que como solo corro por las montañas de esta tierra  no estoy en condiciones de realizar comparaciones, es una carrera muy especial.  Desde que participé por primera vez hace 2 años, siempre ha cumplido con creces mis  expectativas y no me imagino otra carrera mejor en el mundo. No es la prueba más larga, ni la más dura, ni asciende  las montañas más emblemáticas, pero gracias a la gente de los pueblos  y a la organización, el corredor se siente como en casa desde el primer minuto y consigue evadirse del mundo  y sus preocupaciones durante el tiempo que pasa por esas hermosas tierras del Bierzo. Este año y debido a la fuerte demanda ya daba por perdida la posibilidad de participar, hasta que a última hora el diablo decidió ponerse de mi parte y cuando ya pensaba que los dorsales  se habían agotado, ¡zas! conseguí inscribirme, lo cual le da mayor valor a mi participación.

Hablemos de la prueba: ¿En que condiciones llego a esta edición? Pues con 142 km de cacos (70% caminar y 30% correr) y 164 km de bici en las piernas. ¿Serán suficientes? Estoy convencido que si.  Lo más importante no es el volumen en si, sino el hecho de haber  conseguido recuperar la motivación de entrenar en el invierno leonés y el volver  a ser capaz de salir a correr en solitario,  algunos tramos completamente a oscuras,  con 0ºC en el termómetro  y  a las 10 de la noche  o el hecho de  conseguir levantarme a las 7:30 de la mañana para coger la bici y salir a hacer kilómetros con este clima tan tropical que tenemos por estas tierras. Quizás lo expuesto no tenga ningún mérito, pero me gustaría a mi ver al fantasma del Osmin ese de la tele   haciendo algo similar, igual luego la calle dejaba de ser su gimnasio y su "método" no era tan exclusivo. También podría empezar a buscar excusas por si todo saliese mal: que siempre entreno por carretera o pista casi llana, que no piso la montaña desde agosto del año pasado, que solo un día superé y por poco la 1:30 h de entrenamiento, que mi desnivel acumulado total no se aproxima ni a los 1000 metros, pero no dejan de ser justificaciones completamente baldías porque todos los años es lo mismo y siempre consigo terminar la prueba. Físicamente me siento muy bien y anímicamente estoy mejor que nunca. El único aspecto que me descoloca un poco  es que la casualidad ha querido me apenas 9 días antes de la prueba me haya tocado pasar por el taller para  un implante dental (como dicen en mi casa es una pena que el tornillo que me pusieron no fuera el que me falta en la cabeza, pero puestos en contacto con la fabrica me han dicho que después de 38 años ya no estoy en garantía y que a estas alturas  ya no tengo repuestos) y consecuentemente he estado tomando antibióticos y inflamatorias hasta apenas 3 días   antes de la prueba, lo que me produce un cierto respeto. Espero que no me afecte, pero siempre queda la duda de si la ingesta de fármacos me ha podido afectar y si me pasará factura en una prueba que se presenta dura y en la que me aproximaré a las 6 horas de esfuerzo continuado. Ahora bien, lo que no depende de uno no es un problema así que "p'alante" y sin pensar en ello.

Y llega el día señalado en rojo en el calendario. Radio Alto Sil retransmitiendo desde Santa Cruz del Sil. Hoy estamos aquí para presenciar el combate entre 2 pesos pesados (y nunca mejor dicho). En la esquina derecha con calzón negro, camiseta de rayas y un peso oficial de 97,1 kg tenemos al Bisonte del Carbayedo. En la esquina izquierda con 32 km de distancia, 3550 metros de desnivel acumulado y 3 cumbres a la Carrera de montaña Alto Sil. Antes de empezar el combate quiero dejar claro que quiero un combate limpio y que no estarán  permitidos los "golpes bajos". Alto Sil , no se permiten piedras resbaladizas en le cauce del río, ni rocas sueltas en las bajadas, ni hoyos escondidos, ni raíces traicioneras en el recorrido y mucho menos comenzar la paella sin que llegue el último corredor ¿entendido?.... Bisonte, no se permite atajar, salirse del recorrido trazado, ni lo que sería  aún más grave,  contratar ayudantes que te preparen una cordada o te pongan unas escaleras para subir más cómodamente "el muro" al estilo Jesus Calleja, ni contratar 4 sherpas bercianos que te suban a hombros al Pico Negro ¿entendido?  Pues nada,  una vez sentadas las normas básicas puede comenzar el combate, que cada contrincante se sitúe en su lugar y que gane el mejor

Salida de la prueba
Como siempre llego al control de chips con apenas 5 minutos de margen (esto y lo de no dormir bien la noche antes de la prueba por los nervios son marcas de la casa). Pasan los años y a pesar de acumular experiencia, algunos seguimos siendo igual de cenutrios que siempre. Entramos  en el cercado y a esperar la cuenta atrás. La temperatura es muy buena y el ambiente es sencillamente espectacular.

He de decir que antes de esta prueba y con el fin de mejorar mi rendimiento tras el desafortunado incidente de la cuerda en la Transcandamia (si suben 400 corredores agarrados a la misma cuerda y solo te caes tu, es que algo no estás haciendo bien) consulté a los mejores "gurus" del trail y todos me dijeron lo mismo: en esta disciplina deportiva tienes menos futuro que Andres Iniesta como animador socicultural en una fiesta universitaria, eres lento, malo y más descordinado que un  japonés  bailando sevillanas en un tablao flamenco, así que tienes 2 opciones equiprobables: o te dedicas a un deporte que se adapte a tu morfología tal  como el sumo japones, la lucha leonesa o el ajedrez o puesto que vas a llegar de los últimos en todas las carreras, hazte amigo del corredor escoba. Y como soy un tío muy obediente opté por esta segunda opción, así que aunque cuando dan la salida  los corredores salen como toros desbocados, yo  me coloco en la última posición y  salgo del pueblo en compañía de mi viejo compañero de aventuras en la pasada edición, el siempre temido  por los últimos del pelotón  "corredor escoba".

La subida a la primera cumbre la hago íntegramente andando tal y como estaba planeada. El cuerpo pide correr pero la prueba es larga y las fuerzas limitadas. El último km de subida lo hago en la grata compañia de Javier Llano hasta coronar el alto de la Chañada en  35'20" .Comienza el descenso por el cortafuegos, momento en el que poseído por el espíritu del esquiador transalpino Alberto Tomba decido lanzarme en zig-zag , aprovechando los bastones y sin la más mínima y elemental precaución.  La  consecuencia directa es que a las primeras de cambio me llevo una culada interesante como aviso a navegantes. A partir de aquí prudencia el resto del descenso, saltamos el riachuelo  y comenzamos a subir "el muro", que para los que no lo conocen les diré que es un cortafuegos con 400 metros de desnivel acumulado en algo menos de 1000 metros de longitud. Como las fuerzas siguen intactas y gracias a   la ayuda de los bastones  la subida se me hace mucho más liviana que el año anterior, coronando en 1h'00':38" (km 5), Primer tramo completado sin complicaciones. Dejamos el senderismo y nos pasamos al atletismo.

Cortafuegos conocido como "El muro", Km 4 de la prueba
Comienza un tramo básico en mi planificación de la prueba,  ahora toca correr lo más  rápido posible  para no volver a preocuparme más del cierre de control.  Según mis previsiones debería correr a ritmos de entre 5:15 y 5:45 por  km los próximos 5 kilómetros para  no volver a preocuparme del cierre de control en toda la prueba. Para mi sorpresa los primeros  300 metros me cuesta mucho correr normal, supongo que consecuencia de la fuerte pendiente del muro, los músculos están  atrofiados  y me siento como si me hubiesen puesto grilletes en los tobillos, afortunadamente el "efecto pingüino" se me pasa pronto y recupero  sensaciones. En este tramo voy saludando corredores: Santi, Javi, Fernando (perdón si me dejo alguno), 

Al llegar a las primeras casas de Páramo me encuentro con un grupo de unos 15 corredores y pienso para mi ¡que tío más majo y más profesional este Lolo Diez¡ que ha sido el primero en poner  un “globo” de 5h:30 en una carrera de montaña para que tengamos referencias.  Como sigo yendo  muy cómodo adelanto al grupito  y miro mi  Garmin  por curiosidad y para mi sorpresa veo que voy  corriendo a ritmos ligeramente superiores a 4min/km, lo cual me parece sorprendente  porque no corro a esta velocidad desde 1999 y eso era el siglo pasado. Mi primer pensamiento es para los administradores del sistema global de localización por geoposición, que se deben de haber dado todos a la bebida, la semana pasado perdieron un avión en Malasia sin dejar rastro en los satélites y hoy tienen todos los satélites con sistema de retardo para que algunos ilusos  pensemos  que vamos  más rápido.

Llegando al avituallamiento de Páramo del Sil
En fin, un último arreón  antes  de alcanzar el avituallamiento. Enfilar la subida final al pueblo de Páramo de Sil y ver a toda esa gente animando y escuchar el sonido de los cencerros es una autentica gozada. Y llegamos a Páramo (km 9). Toca parada larga en boxes,  hora de estirar, comer y beber abundantemente que esta batalla promete ser larga y el calor aprieta de lo lindo.  

Arrancamos con un tiempo de 1h:29´:00" camino de la  subida a la segunda cumbre del día. Es el  tercer tramo según mi planificación y  toca volver  al senderismo. Caminando a ritmo vivo voy ascendiendo sin contratiempos al Alto de La CamponaPrimero por un tramo  llano ascendente por un bosque entre robles y castaños centenarios y posteriormente por estrechos senderos entre escobas y matorral bajo, hasta alcanzar el pie de la montaña y comenzar el ascenso de verdad ya por pistas más pendientes, hasta pisar las primeras nieves en el km 15 aproximadamente.

 Km 17 de la Subida a La Campona, 

La nieve esta dura y es mucho menos abundante que en  las 2 ediciones previas,  pero a mi me desgasta un montón. Mi peso es  un handicap importante para esta disciplina deportiva,  me entierro más en la nieve que otros corredores más ligeros, y cada 5 o 6 pisadas siempre hay una en la que meto la pata en nieve por encima de los tobillos,  lo que me supone un mayor desgaste a nivel muscular e ir dejando por el camino energías que probablemente me harán falta más adelante.

Pasando por el arco publicitario del Alto de La Campona, 
Correr sobre un precioso manto blanco de nieve y ver un arco publicitario en mitad de la nada es algo mágico e impresiona. A penas 100 metros más tarde toca nueva parada en boxes al paso por la cabaña de La Campona  donde llego con un tiempo de 2h:57:18". Para prevenir calambres o al menos tratar de retrasar su aparición  lo máximo posible me tomo una pastilla de potasio/magnesio y rápidamente arranco camino de Primout por donde debo pasar en menos de 3h;45' si no quiero que me cierren el control de paso

Pista abierta en la cima de La Campona para el paso de corredores
Al paso por cima trato de correr de nuevo, pero noto molestias en la planta del pie derecho  como si tuviera una pequeña rozadura. En principio mi intención es seguir hasta alcanzar sobrepasar el control de paso de Primout, no obstante apenas 1 km más adelante y condiciendo con el tramo de pista que no tiene nieve (aunque a los lados haya más de un metro de nieve) me tengo que detener. Voy con  los pies mojados desde muchos km atrás,  quedan todavía unos 14 km a meta y entiendo que es más prudente comprobar que sucede con mis neumáticos por miedo a que se  esté formando  ampolla. Me aparto a un lado del recorrido  me quito el calcetín, y efectivamente estaba en lo cierto, ya tenía un rozadura (afortunadamente todavía sin ampolla) y me aprovecho de que gracias a   la mochila  voy mejor equipado  que los cosacos que ha mandado Putin para invadir Crimea. Me pongo un compeed y mano de santo (no vuelvo a sentir molestias en toda la carrera). Detalle a destacar y  agradecer es que prácticamente la totalidad de los corredores que me adelantaron se interesaron por mi estado, lo que demuestra el buen rollo y el compañerismo  que existe en esta disciplina de las carreras por montaña. 

Primer km de bajada, camino de Primout
Sin más  dilación, mochila al hombro de nuevo y camino de Primout. Suelo ser mucho mejor bajando que subiendo, pero hoy bajo bastante peor de lo esperado. Y pensar que por estas cuestas bajé hace 2 años sin conocer el sendero, con nieve y niebla como un autentico poseso. Supongo  que el limite que separa la inconsciencia de la temeridad es muy tenue y hace 2 años era bastante más cafre que ahora. Hoy sin embargo voy sin confianza y aunque no es  una bajada complicada prefiero bajar con cautela.  El tramo final de bajada es una autentica yinkana, entre cruzar arroyos, esquivar ramas a derecha e izquierda, atravesar zonas con el barro por encima de los tobillos y agacharse para pasar por debajo de troncos tirados apenas a  metro y medio del suelo, uno tiene la  sensación de estar haciendo pruebas para entrar en los marines americanos.

Bajada de La Campona, camino del pueblo de Primout
Y finalmente entro  en la preciosa  aldea semiabandonada de  Primout y es espectacular la cantidad de publico que hay este año animando. Alcanzo el control de paso de Primout en un tiempo aproximado de 3h:30' (15 minutos de margen hasta cierre de control) y Objetivo cumplido. Segunda parada larga en boxes. Estiramientos, hidratación, algo de réflex para cuadriceps y biceps famorales  y tras 5 minutos de pausa a correr toca. Este tramo es muy cómodo, siempre pica para abajo pero sin apenas pendiente y se puede ir muy rápido. Salgo completamente solo  del pueblo y con el fin de encontrar  alguna referencia  decido contar el numero de corredores que soy capaz de adelantar,  pero para mi sorpresa a las primeras de cambio sucede lo contrario y me  adelantan 3 corredores gallegos que vienen fuerte desde  atrás y decido cogerles rueda como en ciclismo. No voy tan fuerte como hace 2 años pero voy infinitamente mejor que el año pasado,   ya que en esta zona fue donde colapse muscularmente y las pase canutas de aquí a meta.

No tengo la sensación de ir rápido, pero lo cierto es que voy poco a poco adelantando corredores y finalmente llego a   la Braña  de Santa Cruz en 4h:03´:03" tras haber adelantado 18 corredores, lo que no está mal.

Tramo de recorrido entre Primout y La Braña de Santa Cruz
Parada muy rápida en el  avituallamiento y camino del Pico Negro (casi nada). Lo primero es cruzar el río que este año baja con bastante agua. Voy tan concentrado que ni si quiera me percato de  que han puesto una cuerda de apoyo (lo cierto es que después del incidente en  la Transcandamia tampoco me fío yo mucho de mi habilidad en el uso de cuerdas) y me lanzo a cruzar como si liderase una manada de bisontes en estampida. Todo el día quejándome de mi peso y por fin encuentro una ventaja, para que me lleve la corriente no es necesaria una crecida, sino  un tsunami  ¡menudo es el bisonte!

Cruzando el río (por detrás un corredor agarrado a la cuerda)
Al principio de la subida me detengo para gastar mi última bala y tomarme un gel de absorción rápida. ¡uffff! Visto desde abajo y a estas alturas de la prueba,  el Pico Negro mete miedo. A partir de ahora, mochila al hombro, apretar bien los cordones de las zapatillas, agarrar fuerte los bastones, agachar la cabeza y procurar concentrarse en el esfuerzo para mantener un ritmo de subida constante. Es un pico jorobado, es muy constante en pendiente, sin ningún descansillo y uno ya llega castigado, no obstante no tengo ninguna queja de la subida.  

Finalmente corono en  4h:40´:30" (37´:27" de tiempo de subida y puesto 281 de la general masculina en la clasificación parcial). El mundo al revés, hoy estoy subiendo mucho mejor que bajando. Aparentemente me veo bien físicamente  pero veremos que sucede en el tramo final. La parte teóricamente más complicada de la prueba ya esta superada y solo quedan 5-6 km de descenso hasta Santa Cruz del Sil. Digo lo de relativo  porque para el 95% de los corredores lo peor ya ha pasado,  pero  para mi esta zona es la peor de toda la prueba, de hecho yo la denomina “The Walking Dead” porque las 2 últimas ediciones llegue a meta convertido en un cadáver andante. Si Llegas con fuerzas y las piernas te responden puedes adelantar a muchísimos corredores, ahora bien si llegas jodido te conviertes en zombie y las pasas canutas. ¿que tocará este año?

Arriba aprovecho para saludar a Jose Manuel que está de juez arbitro con el cronometraje oficial, y para mi sorpresa me comunica que debo  acelerar porque en el siguiendo avituallamiento hay previsto  un control de paso y falta poco para el cierre de control. ¡Cagu’n mi mantu! Esto no entraba en mis planes y menos teniendo 1h:20' de margen para llegar a meta (el tiempo límite en meta son 6h). Con el peligro del cierre de control,  me lanzo a la carrera para abajo y nada más necesito 300 metros para saber que este año no solo   volveré a ser zombie, sino que este año voy a ser el rey de los muertos vivientes y la mismísima reencarnación de Michael Jackson en Thriller Madre mía que dolor de cuadriceps, no se me suben porque voy con malla corta de compresión, pero cada zancada es un suplicio. A duras penas y haciendo un esfuerzo ímprobo intento correr al menos hasta el último avituallamiento y una vez que libro el control de paso constato que estoy literalmente  para que me coman los lobos.


En el último avituallamiento. Correr el Alto Sil con una sola pierna tiene mucho mérito.

Tiempo de paso por este último avituallamiento 4h:53':31". A partir de aquí el único objetivo es  llegar a meta como sea  aunque sea reptando como una culebra de río. Por suerte ya empiezo a tener experiencia en gestionar este tipo de situaciones, al fin y al cabo todas mis carreras acaban casi siempre igual. Eso no quita que para mi  sea tremendamente  frustrante llegar sin piernas a meta en todas las pruebas, cuando a nivel orgánico llego bien y con la sensación de poder correr mucho mas rápido, pero es lo que hay y pensar otra cosa es perder el tiempo.

Tramo final de bajada camino de Santa Cruz del Sil 
Lo que toca  es regular, tirar de experiencia y tratar de avanzar de la manera más cómoda posible. Gracias a los bastones de travesía consigo descargar parte de la presión sobre las piernas y caminando soy capaz de avanzar de una manera más o menos digna. A media bajada y a unos 2 o 2,5 km de meta me encuentro con el famosa nueva sorpresa de Lolo Diez, que se ha estrujado los cuernos para encontrar un  nuevo tramo espectacular, pero a mi particularmente me acaba de rematar. Es un tramo de  bajada por un camino anegada sobre lecho de barro y piedras y en muchos tramos con el agua por  los tobillos, sin contar con que todavía tienes que pasar un par de veces riachuelos con agua muy fría. 

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Apenas a  un km de meta me adelanta un participante que baja  corriendo a un trote cochinero y al pasarme me anima, pero le contesto que no puedo correr  cuesta abajo porque voy sin cuadriceps.  Unos  100 metros más adelante  cogemos un falso llano ascendente y más por orgullo torero que por fuerzas,  echo a correr y le adelanto. Le animo yo a él y me dice que no puede correr subiendo que va sin gemelos ¡¡¡Alto Sil en estado puro!!!, finalmente el  breve tramo de subida se acaba, el camino se empina para abajo y  vuelvo a la triste realidad, veo como el compañero se aleja irremediablemente y yo vuelvo a avanzar convertido en Chiquito de La Calzada, cruzamos el ultimo puente y veo la primera casa del pueblo. Este año el final es cuesta arriba y calculo que quedaran apenas 300 o 400 metros. En circunstancias normales estaría jurando  en arameo, pero voy tan "tocao" de cuadriceps que cada cuesta arriba es una bendición, así que gastando el ultimo álito de energía, aumento zancada y entro en meta muy cansado pero con la inmensa satisfacción del deber cumplido.

Esto es lo que queda de mi después de la batalla (un par de kg se han quedado por la Sierra de Gistredo)

En meta un tiempo oficial de 5h:30':57" en el puesto 346 de la clasificación general masculina (sobre 372 corredores masculinos en meta) y puesto 365 de la general total (sobre 393 corredor@s en meta) y sobre 450 corredor@s  que creo son los que tomaron la salida de la prueba. El ganador de la prueba fue Zaid Ait Malek con un tiempo de 2h:52':40", quien  podría haber dado 2 vueltas al recorrido de la carrera y todavía habríamos llegado casi a la vez.

La paella de meta
Para concluir una ducha con agua fría para resucitar de entre los muertos y una paella en buena compañía que sirve para rematar un día fantástico. Una jornada para desconectar del mundo , para disfrutar y para conocer nueva gente del mundo del trail y que merece mucho la pena:  al lobo de monte  Rubén Seco (que carrerón has hecho gallego), a  mi paisano Ruben Nembra (demonión, estás casi tan “averiao”· de la cabeza como yo, je,je), a Javier Llano (este año  no has podido acabar pero el año que viene lo consigues seguro) y a Eduardo Flecha (hoy has tenido un mal día y aún así has conseguido terminar, pero en la Zegama vas a volar).

Conclusiones:
1.- De las 21 mujeres que llegaron a meta, me ganaron 19.  Claramente la opción de operarme para cambiar  de sexo con el fin de mejorar en la clasificación no parece una buena opción.  En categoría masculina soy  malo, pero con lo guerreras que son las chicas en trail,  mi futuro sería mucho más oscuro en categoría femenina.
2.- Una lastima que ningún productor de Hollywood se haya pasado por Santa Cruz, mi fantástica interpretación de muerto viviente los últimos 4-5 kms era merecedora de un papel protagonista en alguna serie americana/película americana de terror.
3.- Si Dios quiere y You event o cualquier otra plataforma de inscripción no lo impide , volveré año tras año a Santa Cruz hasta el fin de mis días.  Los buenos dicen que es una carrera que nada tienen que envidiar a las mejores de la copa del mundo, los demás corredores disfrutan como enanos y yo que soy muy malo digo que para mi no hay otra carrera igual en todo el mundo
4.- Solo hay un camino valido para mejorar en esta disciplina: ENTRENAR, ENTRENAR y ENTRENAR. No hay atajos y  es un deporte justo, si entrenas corres más tiempo y más distancia y sino todos los años acabaré exactamente igual que hoy.

Mi último recuerdo es para  los habitantes de Santa Cruz y Páramo del Sil y para todos y cada uno de los colaboradores, voluntarios, fotografos y en especial para Lolo Diez ( corazón y alma mater de esta grandísima prueba). GRACIAS A TODOS Y CADA UNO DE VOSOTROS  por hacer posible esta carrera y por dejarnos formar parte de ella. Gracias por vuestro trabajo desinteresado, por vuestro esfuerzo y dedicación y por hacerlo todo siempre con una sonrisa y con esas ganas de ayudar que hacen del Bierzo una de las tierras más acogedoras que conozco. 

¡¡¡JOerr!!! Como se nota que es mi carrera favorita del año,  esta crónica se me ha ido claramente de las manos...poco más y  acabo escribiendo "Guerra y Paz", igual de larga  aunque evidentemente con bastante menos calidad literaria que  León Tolstói.


Este viaje no termina aquí. Próxima parada Trail de La Biosfera en Ciñera de Gordón.


Nos vemos corriendo.