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viernes, 26 de abril de 2013

Biosfera Trail 2013


Vista de los montes de Gordón por los que discurre la Biosfera Trail
He de reconocer que no me resulto nada sencillo tomar la decisión de participar en esta prueba  y por esa razón me apunte el último día, y no es porque la carrera  no tuviera todos los alicientes necesarios, sino  sencillamente porque  después de mi última experiencia en el Alto Sil, he reflexionado mucho sobre lo acontecido y  he llegado a la conclusión de  que no  se puede, ni se debe  recurrir a la épica por rutina cada vez que uno se pone un dorsal. La montaña  es hermosa pero no es un juego y arriesgar en exceso y de manera gratuita no es una muestra de valentía,  sino una temeridad. Y es que 4.222 metros de desnivel acumulado podrían parecer a simple vista un mero  guarismo, pero en la  composición de lugar que yo me hice significaba que con una pendiente media y constante del 10% sería necesario recorrer 42 km para superar semejante desnivel (media maratón ascendiente al 10% sin descanso y otra media descendiendo con el mismo porcentaje), pero es que para más señas la prueba solo tiene 26 km de distancia, con lo cual la pendiente media es del 16,22% y si a esto le sumamos que hay que ascender y descender 5 cumbres, pues esto justificaba que tuviera serias dudas sobre si a nivel muscular tendría aguante suficiente para   completar la prueba. En cualquier caso una vez que se toma la decisión  ya no hay vuelta atrás .

Salida de la prueba en el pueblo de Ciñera de Gordón
A las 9 de la mañana  y con una temperatura que no creo que superase por mucho los 0º  centígrados se dio la salida, con 179 corredores  en liza y un día  que amanecía esplendido   Para comenzar  una vuelta por el pueblo y tras recorrer unos  2700 metros prácticamente llanos, comenzamos la primera subida del día. 

Partiendo de lo expuesto inicialmente, mi idea era guardar fuerzas y cuidar las piernas lo máximo posible, lo que implicaba comenzar a un ritmo lo más llevadero posible, y la consecuencia es que a pesar de salir corriendo durante la totalidad de  este primer tramo voy literalmente de los últimos, hasta el punto de que a los 500 metros de ascensión detrás mía solo vienen otros 2 participantes  y el corredor escoba. Mientras tenga gente por detrás  no hay riesgo de quedar fuera por descalificación,  así que a disfrutar del entorno y a "cuidar los  neumáticos"  que la prueba es dura. 

Lo cierto es que esta primera ascensión es bastante sencilla, la pendiente no es pronunciada, no hay ninguna dificultad técnica y el sendero es muy bueno, por lo que sin ningun contratiempo corono la Peña Colorada en 54':52". En la cima me tomo un respiro, guardo los bastones en la mochila y siguiendo las indicaciones de los voluntarios a lo lejos veo el Cueto San Mateo (casi nada lo que nos queda por delante). 

Tramo final  de ascensión con la Peña Colorada al fondo
Tramos intermedio de subida a Peña Colorada


Coronando la Peña Colorada





Y sin más me  lanzo para abajo. La sensación es que esta primera bajada es una autentica autopista,  primero por hierba, luego por un sendero que atraviesa un  bosque y finalmente por pistas hasta llegar a Santa Lucia se puede bajar a un ritmo bastante alto, aunque yo procuro retenerme para no machacar los cuadriceps demasiado pronto.

Llegamos al primer avituallamiento y es tiempo  para reponer fuerzas, intercambiar impresiones  con otros corredores y posicionar la carrera de nuevo. Sigo teniendo 2 corredores más el escoba solamente por detrás, pero físicamente estoy muy integro y sin más dilación arranco  camino del Cueto San Mateo "el ogro de la prueba". 

El primer tramo de ascensión  hasta llegar llegar al alto del Rasón no es nada complicado y desde allí un falso llano de 1,5 km aprox corriendo por el interior de un Robledal  hasta llegar a los pies del Cueto, y lo cierto es que visto desde abajo la montaña  impresiona. 

El Cueto san Mateo visto desde abajo
A pie de puerto llevo 1h:52': 01" de tiempo.  Por delante un reguero  de corredores que me preceden subiendo como hormigas, y aunque no tengo muy claro por donde ascenderemos semejante pared, arriba ya se ven  corredores. Comienza lo duro, enciendo el mp3, agacho la cabeza, acompaso la respiración y el paso y para arriba hasta coronar los 1609 metros del  pico en 2h:18':02".

Subida al Cueto San Mateo
Tramo intermedio de subida al Cueto


Coronando Cueto San Mateo

Corredores en la Cima del Cueto San Mateo
En cumbre  tiempo para disfrutar de las vistas,  para reponer fuerzas y  guardar los bastones con el fin de  mantener las manos libres durante descenso que aparenta ser bastante  técnico. Y nos lanzamos montaña a abajo. El primer tramo aún siendo técnico no me parece tan complicado como preveía en principio (si se baja con la debida precaución), después viene un tramo intermedio bastante  sencillo y el tramo final que es posiblemente el  más técnico de toda la prueba, y en el que debes bajar agarrado a una cuerda en algunas zonas (en realidad más bien es una manguera), y con algún sencillo destrepe.

Tramo final de descenso del Cueto San Mateo

De repente durante la bajada  y "a traición" te encuentras con la gran sorpresa de la prueba, debes cruzar por una  antigua galería minera de unos 200-300  metros de longitud. Entras por la boca de la mina  con los ojos adaptados a la luz del día  y por  contraste con la oscuridad reinante en la galería, mientras las pupilas se adaptan al nuevo medio  te quedas  completamente ciego. Un voluntario con una linterna recorre contigo los primeros 20-30  metros  hasta que te adaptas al entorno. Cruzas esta galería y te encuentras con un segundo túnel mucho más corto y consecuentemente más luminoso y tras salir de él,  completamos la bajada y nos encaminamos al segundo avituallamiento, no sin antes afrontar  un exigente repecho para  que las piernas no se relajen en exceso. 


Entrando en la primera galería minera
Corredores atravesando la primera galería minera en completa oscuridad
Entrada al segundo túnel
Repecho al final de la bajada del Cueto, antes de llegar al segundo avituallamiento

La prueba empieza a pasar factura y como vengo de atrás  me voy encontrando con algunos   corredores que abandonan por  torceduras de tobillo y con otros que   empiezan a padecer problemas musculares, y eso que  todavía quedan 3 ascensiones por delante

Al llegar al segundo avituallamiento estiro un poco,  hago un chequeo rápido  "Midas" de mi organismo y las conclusiones son muy buenas. Voy mucho mejor de lo esperado, sin problemas musculares y orgánicamente muy entero. He sido capaz de adelantar  a algunos corredores por lo que me olvido definitivamente del corredor escoba en lo que a esta carrera se refiere.

Comenzamos la tercera ascensión del día , con total seguridad la más sencilla con diferencia de las 5 cimas de las que consta la  carrera, siendo apenas una colina que separa Santa Lucia de Ciñera, con una pendiente bastante asumible. El primer tramo por pista, un tramo intermedio por bosque y por último un tramo final que discurre por un terreno altamente erosionado como consecuencia delas labores mineras,  y que más bien parece un paisaje propio de una isla volcánica como Lanzarote. En cualquier caso  corono el pico en 3h.16':29".  

Tramo intermedio de subida por el robledal del monte de la Mata
Tramo final de ascensión a la tercera cima del día

La bajada tampoco muestra ninguna dificultad reseñable y sin contratiempo  nos plantamos en el Faedo de Ciñera para comenzar la penúltima ascensión de la jornada.


Entrando en el Faedo, camino de la cuarta ascensión
Esta cuarta subida si se empieza a hacer dura. Las piernas ya van castigadas después de más de tres horas y media de esfuerzo, la pendiente es importante y hay algún tramo de piedra suelta que dificulta el avance. En  mi caso, tengo la suerte de ir encontrándome con gente conocida, que me va dando ánimos y lo cierto es que en estos momentos cualquier ayuda se agradece y se nota.  Primero me encuentro con Alex Santos en la escombrera de la Hullera y  unos 500 metros más arriba, cuando empieza el tramo más complicado, escucho los gritos de ánimo   de Roberto Dieguez que esta encaramado en un peña. 


Tramo de subida al cuarto pico, con la mina a cielo abierto al fondo
Llegando a la escombrera de la Hullera Vasco Leonesa
Otra panorámica de la subida (km 19 aprox.)
Tramo final de ascensión 
Coronando la cuarta cima de la carrera a 1.450 metros aprox,

Y finalmente consigo coronar  en 4h:08'.28" y me encuentro con otra grata sorpresa. En lo alto de la cima a unos 1450 metros de altura y sin ninguna pista cerca, la organización ha montado un avituallamiento, pero no solo hay agua como pudiera ser presumible, sino que los voluntarios  (entre los que reconozco a  Sergio Natal) también han subido a peso una caja completamente llena de naranjas y plátanos. Uno se queda sin palabras ante esto, porque el corredor se apunta a estas pruebas  para disfrutar, pero esta gente  sacrifica un domingo  de manera desinteresada para que otros podamos disfrutar de este deporte, así que solo cabe darles las gracias.

Tramo inical de bajada de la cuarta cima

Y toca bajar de nuevo  en dirección al Faedo, en este caso por una bajada que combina tramos bastante técnicos con otros más sencillos, pero que es una autentica gozada. Llegando al  tramo final del descenso y justo  antes de enfilar el cañón que  lleva al Faedo, los cuadriceps amenazan con dar guerra, no obstante  en seguida recuerdan lo que les sucedió la última carrera y para mi que me tienen  miedo porque en seguida dejan de protestar, en cualquier caso y con le fin de prevenir males mayores, decido gastar  la última bala que me queda en la recamara y me tomo un pastilla de magnesio y mi segundo y último gel. Si me tienen que dar calambres que sea por sobresfuerzo y no por una mala alimentación o hidratación.  Superado este último tramo en el que hay que echar las manos a tierra por momentos, entras en el tramo más bonito de toda la carrera, corriendo sobre una pasarela de madera que cuelga literalmente del río y más tarde atravesando el Faedo. !!!ufff¡¡¡ son imágenes de postal que se quedan gravadas en la mente, y es que es una autentica maravilla salir corriendo por una pasarela sobre el río y adentrarte  por el sendero de madera en un bosque mágico de hayas centenarias y prácticamente inalterado por la mano del hombre, que  con razón ha sido galardonado con el premio al bosque mejor conservado de España. Lugares como este hacen por si solos que merezca la pena correr esta carrera.

ultimo tramo de bajada antes de coger la pasarela que lleva al Faedo
Pasarela de madera sobre el río, camino del Faedo 
Tramo que atraviesa el Faedo de Ciñera
Otra vista del Faedo de Ciñera

Y toca parada en boxes en  el último avituallamiento de la jornada   donde llego en  4h.39'.42".  Tiempo para beber y reponer fuerzas, para estirar un poco y volver a sacar los bastones de la mochila para afrontar la subida final. Aprovecho que se ha formado un grupito de 5 o 6 corredores y comienzo la última ascensión del día. A los 150-200  metros de subida la cosa se empieza a poner seria. Se me agarrotan completamente las  piernas por la parte interna del muslo y esto si que es una novedad, lo cierto es que no se ni de que musculo se trata, no se si es el abductor o el recto interno, pero  lo cierto es que me cuesta una barbaridad avanzar cuesta arriba. Y aparece el único momento de zozobra de toda la prueba, y me pregunto ¿como narices hago para estirar estos músculos en mitad de un "pedreru"?. Solo me queda apartarme a un lado y dejar pasar a los 5 o 6 corredores que venían por detrás, llegados a este punto hay que llegar si o si a meta,  para atrás ni para coger impulso, así que me tomo un descanso  y a practicar la "economía muscular de guerra"  subiendo  a pasos muy cortos y tratando de forzar lo mínimo estrictamente imprecisdible, aunque esto implique subir a paso de tortuga. Hay mucha piedra suelta, no se impulsa correctamente  y cuesta ascender. El grupo de 5 o 6 corredores que subían conmigo se van escapando, pero esa no es mi guerra y   me concentro en avanzar paso a paso.  Cuando llevo unos dos tercios de subida asombrosamente me empiezo a encontrar mejor  y como si de un  un formula uno que supera el blistering de sus neumáticos se tratase , las piernas empiezan a responder de nuevo (probablemente lo que me sucedía es que los músculos estaban algo deshidratados y ahora  me empezaba a hacer efecto la pastilla de magnesio que tome al final de la bajada  del cuarto pico). El tramo más duro de subida ya estaba completado, atravesamos un tramo más sencillo y  finalmente corono la Sierra del Sardonal   en  5h:07':16" .

Subida a la Sierra del Sardonal
Tramo final de subida a la Sierra de Sardonal

Y llega el cresteo final al que le tenía bastante respeto,  y aunque por prudencia nunca se debe  cantar victoria hasta cruzar la linea meta, me invade una sensación de euforia difícil de explicar.  De alguna manera soy consciente de que ya esta hecho,   para abajo no voy tocado de cuadriceps y ya no quedan subidas, quizás sea por esta sensación, pero lo cierto es que este tramo voy comodisimo y disfrutando como un enano. 

 Unos 500 o 600  metros por debajo esta el pueblo de Ciñera y pienso que  voy a llegar a meta  aunque me tenga que tirar rodando por la ladera de la montaña. Tras  completar este preciosos cresteo, pasamos por la cruz de hierro y enlazamos el último tramo de bajada hasta alcanzar las primeras casas del pueblo y desde allí nos queda algo menos de un kilómetro por un sendero llano. Al fondo se intuye  el arco de meta y se escuchan las voces de la gente, así que a pesar del castigo acumulado  las piernas corren solas  hasta el punto de conseguir  adelantar a 2 corredores que me precedían y consigo entrar en meta con mucha más fuerza de la que en origen pudiera ser previsible..


Cresteo final camino de la Cruz de Hierro
En meta un tiempo final de 5h:38':00"   a .2h:26':28" .del ganador  Eulogio Bello Alvarez. Puesto 118 de la clasificación general  sobre 179 corredores en la salida. Para dar fe de lo dura que resulto la prueba  solo hay que comprobar que a meta solo han llegado 139 corredores, es decir, ha habido 40 abandonos y eso es  un ratio del 22'34% o dicho de otra manera que han abandonado 1 de cada 5 que tomaron la salida (y eso que muchos son corredores experimentados en pruebas de montaña)

En meta con la medalla de Finisher.
Me entregan la medalla de finisher y me entra una satisfacción enorme. En casa tengo otros trofeos y medallas de cuando competía muchos años atrás (a veces pienso que fue  en otra vida), premios  que me daban por ganar carreras o por hacer podiums, o lo que es lo mismo por ganar a otros corredores en competición, pero esta la primera medalla que me dan por superarme a mi mismo (eso es lo que significa acabar este tipo de pruebas) y lo cierto es no la cambiaría por ningún otro trofeo (quizás solo sea el consuelo  de  quien no volverá a disputar podiums nunca más)

Igual que otras veces reciben criticas, hoy es de justicia felicitar a Roberto Ferreras, Anibal Miguel , a todos los voluntarios que han colaborado y a los pueblos de Ciñera y Santa Lucia de Gordón porque gracias a ellos hemos podido disfrutar de una carrera SOBRESALIENTE. Habrá muchas más ediciones, porque a poco que la cuidemos,  esta carrera será referencia en el norte de España de aquí a uno años.

Para completar  un magnifico día deportivo, una  opípara  comida en una terraza junto al río en el bonito pueblo de Carbonera, en la inmejorable compañía de estos cuatro fantásticos corredores: Cañi, Yeti, Victor y Seve.



Y el último párrafo de esta crónica esta especialmente dedicado a mi fiel Schnauzer gigante Xicu . El verdadero tamaño de un amigo  no se mide por el espacio que ocupa cuando esta en tu vida, sino por el hueco que deja cuando ya no esta.  Más de cinco horas y media de carrera, muchas veces en solitario, dan para meditar y darle muchas vueltas a la cabeza. En mi caso para confirmar que tus  casi 50 kg de peso y tu metro de alzada eran  un tamaño ridículo  al lado del gran vacío  que has dejado en casa. Quizás no  siempre te hayamos  demostrado lo mucho que  te apreciábamos  pero quiero darte las gracias  por los 8 años, un mes y 3 días que has sido parte de esta familia. Es probable que  tu inmenso  corazón y tu gran fortaleza me hayan ayudado hoy cuando mis piernas empezaban a flaquear, en cualquier caso, el haber cruzado esta meta va por ti amigo.  Allí donde te haya llevado tu camino, descansa en paz  y corre libre. 

Xicu :  14.03.2005 - 17.04.2013



lunes, 15 de abril de 2013

Camino de la I edición del Biosfera Trail

Después de la borrachera de sensaciones vivida en   la Carrera de montaña del Alto Sil  inevitablemente tocaba pasar la consiguiente resaca y a mi dicha experiencia me duro dos semanas íntegras. Tras 15 días completamente parado  tratando de  recuperarme a nivel muscular  del tremendo esfuerzo acometido en el Sil, por fin tocó calzarse  de nuevo las zapatillas de montaña  para  volver a entrenar. Y llego la  hora de buscar nuevos retos y motivaciones. En mi caso me costó mucho más de lo habitual decidirme por la siguiente prueba y es que 4200 metros de desnivel acumulado en tan solo 26 km de distancia me hizo sentir verdadero vértigo (como dice el cartel de la prueba), pero finalmente sucedió lo inevitable y es que a la mínima oportunidad la cabra siempre acaba tirando  al monte, o dicho de otra manera, sufro lo que yo denomino el "Sindrome de Chuck Norris" y es que me sucede como a él en la saga "Desaparecido en combate",  no se como me arreglo pero al final acabo metido en todas la guerras posibles.


El próximo fin de semana correré la primera edición del Biosfera Trail, donde espero disfrutar de los preciosos valles y montañas de la comarca Leonesa de Gordón, así como del afamado "Faedo" de Ciñera. Estaré según mis cálculos previos entre 6 y 7 horas por el monte, así que creo que habrá tiempo de sobra para disfrutar de lo anteriormente expuesto.

En otro orden de cosas y tras realizar constante apología de las carreras por montaña en mi blog, me alegra ver que algunos de mis compañeros de equipo en el Club Maratón Benavides han mordido la manzana y se han decidido a dar el salto a esta disciplina. En este caso  es  el gran capitán y presidente del equipo Talo, el que si sus obligaciones personales  se lo permiten, disputará la prueba y  para mi será un autentico honor acompañarlo en su debut en la disciplina.

Finalmente   tambien he tenido  tiempo para planificar (si no surge ningún contratiempo adicional)   mi calendario de carreras  para  los próximos meses, con cabida para una única prueba por mes:

MAYO: Carrera de montaña Truchillas-Vizcodillo
JUNIO:  Travesía de los Montes Aquilianos
JULIO: La Batallona de Somiedo o  Ecotrail de Omaña
AGOSTO: Carrera de montaña Villalfeide-Polvoreda

Nos vemos corriendo